MATERNIDAD

Junto a la
sombra
del
tiempo, el amor está vivo.
La madre riega la lengua
de su hijo, y éste la aleja de su sed.
La alarga
hasta ella
misma.
Va
lamiendo
su entraña,
intensamente
comprendida
en
jugo,
en
alimento interminable.
Luego la
madre ríe
amorosa el
hambre de
su hijo.


Anterior Portada Índice Siguiente